Es pronunciar la palabra Madagascar y es inevitable que a todos nos venga a la cabeza la tan famosa película de dibujos animados con el mismo nombre y canturreemos la canción «Yo quiero marcha, marcha…» Parece irónico pero eso es lo que nuestro equipo dió y tuvo, mucha marcha. Un equipo de 11 personas venidos de todas partes del mundo con una misma intención, operar el máximo de cataratas y ayudar al máximo a la comunidad. Un equipo que, desde el primer momento fluyó y se unió haciendo de su experiencia algo muy motivador y gratificante. Un equipo que, aunque trabajara durante horas y horas no le faltaba en ningún momento del día una sonrisa y muchas ganas de marcha, marcha. ¡Por más expediciones como esta!
Tras 7 días en Madagascar, los rostros de aquellos a quienes ayudamos permanecen grabados en nuestra memoria, reflejando esperanza y agradecimiento. Realizamos 375 cirugías, y aunque cada historia es única, todas comparten un hilo común: el deseo de ver el mundo de nuevo. Nuestro equipo, diverso y apasionado, ha demostrado que no importa de dónde vengamos o qué idioma hablemos, la empatía es universal.
Agradezco siempre a Fundación Elena Barraquer y Elena B. por la oportunidad y por permitirme aportar mi grano de arena.
Solo palabras de admiración al dream team que me acompañó: Manuela Masseroni, Zeltia Muńoz cocińa, Fabio Contieri, Nerea Garmendia, Tania Alvarez, Anna Sanllehi, Alexia Jimenez de Parga Punset, Berta Roda García, Natalia Mingorance. Y no olvidar a los motores de la fundación, que sin ellas nada sería posible Maria Bertrand Teté Ferreiro
“Si ayudo a una sola persona a tener esperanza, no habré vivido en vano.” Martin Luther King
Leo Ferlini – Cirujano
Me llamo Nerea Garmendia, tengo 20 años y actualmente estoy en cuarto de enfermería. Es a la segunda expedición con la Fundación Elena Barraquer en la que participo como voluntaria y, no podría estar más agradecida.
Hemos formado un equipo increíble, nos entendíamos con la mirada y trabajábamos compenetrados. Me llevo conmigo muy buen recuerdo de dicha expedición, llena de emociones positivas y compañeros de por vida.
Ha vuelto a ser un placer poder formar parte de algo tan especial y espero y deseo poder seguir participando.
¡Muchas gracias a todo el equipo de la Fundación Elena Barraquer que hace que esto sea posible!
Nerea Garmendia – Voluntaria de Campo
Durante mi estancia como voluntaria de campo en Antananarivo, Madagascar con la Fundación Elena Barraquer, tuve la oportunidad de trabajar mano a mano con un equipo médico dedicado a brindar la mejor atención oftalmológica. Trabajamos incansablemente, fue una experiencia enriquecedora, ya que pude presenciar de cerca cómo ésta atención médica transformó las vidas de las personas en una comunidad tan necesitada. Además, me permitió sumergirme en su fascinante cultura. Fue un honor haber sido parte de esta misión humanitaria en el Hospital Joseph Ravoahangy Andrianavalona.
Anna Sanllehi – Voluntaria de Campo
